24 mayo, 2014

...Venas y balones: La pasión Argentina...

La pasión es lo que mueve al ser humano. Es con lo que cada uno de nosotros nacemos, que lo vamos cultivando en las venas y termina marcando el destino de nuestras vidas.



Una pasión está por encima del amor, de la costumbre, de la religión, de los instintos, la pasión es lo que recorre tus venas como la sangre que bombea el corazón. Eso es lo que despierta Argentina, la camiseta albiceleste y ver a Maradona alzando la Copa del Mundo mientras las gradas estallan de emoción vibrando al galope de un sentir mundial.



Se viene Brasil 2014 y nuevamente, los argentinos han hecho un buen trabajo para hacer rodar por nuestra cara las lágrimas por el buen fútbol, por esa pasión que parece haber nacido en la tierra del Papa. Solo Argentina despierta emociones tan intensas que te llevan a pensar en una sola cosa: ver al equipo levantando la Copa, besándola como besamos a un primer amor; con timidez, con picardía y finalmente con ganas, con deseo, con pasión.

Los argentinos con su publicidad, logran el cometido de hacerte olvidar que naciste en otras latitudes y simplemente te venden la patria, la bandera y el “Todos somos Argentina”, un país que desayuna fútbol, almuerza fútbol, cena fútbol y sueña fútbol, no importa cuántos sean los obstáculos para alcanzar ese objetivo: el gol de la victoria para derrumbar el estadio.