Trato de ver a mi asesino pero ya no está. Ha dejado el arma junto a mí. Tal vez para que yo sea el que tome la decisión definitiva. Con las pocas fuerzas que me quedan tomo la pistola. Siento el sabor del oxido del cañón en mi boca.
Presiono el gatillo. Ahora todo es luz. He muerto para volver a nacer.