09 febrero, 2020

Yin yang (Qué piensan las mujeres)


Comencé este blog en 2007 preguntándome qué piensan las mujeres, definiéndolas como unos seres enigmáticos, sorprendentes, calculadores pero sobre todo, extremadamente perfectos y hermosos.

Ahora casi 13 años después de escribir esas líneas ratifico lo que dije pero también debo agregarle un detalle, una confesión que me cuesta hacer pero que debo dejar de ocultar: mientras más deshinbidas, atrevidas, pervertidas, sexuales, incluso con cierto toque de re(puta)ción y vagabundería, más me gustan.

Ese tipo de chicas son increíbles porque emanan una atracción que es digna de estudio. Tan seguras de si mismas, de sus cuerpos, de su sex appeal, de lo que pueden causar a la vista de un hombre que no dudan en atreverse a explorar, curiosear, buscar lo que no se les ha perdido y dejarse llevar por lo que sus genitales a veces desean.

Son como diosas que caminan entre los mortales, flotando con un aire de normalidad que a veces asusta. Porque eso es lo peor de todo, que saben ocultar sus dotes de una manera tan genial que con ellas también puedes hablar por horas sin aburrirte, son tan sencillas como una persona común y corriente.

Hacen deporte, trabajan incansablemente, se preocupan por su familia, por sus amigos, pero cuando llegas a conocerlas más profundamente y descubres su lado perverso tienes el cielo ganado porque son el ying y el yang de las emociones: calor (diablitas) y tibiesa (angelicales).

No estoy seguro de lo que quieren pero podría decir que estas chicas, las que acabo de describir, solo desean sentirse amadas, deseadas y sobre todo valoradas por lo que son: unas mujeres hechas y derechas que no necesitan de nadie para conocerse y apreciarse.