30 diciembre, 2012

...¿Para qué escribir?...

¿Si no tengo nada que decir, para qué escribo? Esa es la pregunta que a veces deben hacerse muchos, yo entre ellos. Lo hago como un ejercicio, como la válvula de desahogo a la olla de presión que es mi cabeza. Son todos mis pensamientos volcados al papel sin orden, ni ritmo, ton ni son, simplemente un puñado de letras describiendo mi día a día y mis impresiones de una realidad abstracta, desordenada y llena de pretensiones de los que quieren brillar a costa de otros, esa realidad parecida a la que veía John Doe – interpretado por Kevin Spacey – en el muy brillante largometraje “Seven”. 

A partir de todo ese abecedario ordenado a punto, para formar ideas legibles y comprensibles por el lector, me propongo a crear un mundo o universo que sea un poco más digerible y ajustado a lo que vivimos en este globo terráqueo que gira sin parar las 24 horas del día. Por eso escribo de asesinatos, de muerte, de sexo; en fin puras ideas derivadas del instinto, incluso me acuerdo del odio y el amor, dos piezas clave que son la chispa para el proceso de procreación: unos tienen sexo por amor, otros se entregan en la cama (a veces en su primera vez) por rabia, como un motivo de venganza para hacerle daño a otros y quitarse de encima esa cruz que se llama virginidad, algo muy pasado de moda y olvidado en los anales de una sociedad cada vez más materialista y tecnológica. 

Escribo para recordar que afuera hay un mundo donde cada día mueren personas, donde existe gente a la que maltratan y para mostrar en lo que otros no quieren ver. Una vez dije que el motor de mi blog son las mujeres, creo que eso ha cambiado, ahora tengo el motivo de escribir por instinto; como un animal que se deja llevar por las emociones para construir mundos ajustados a la realidad, una que lastimosamente no nos da lo que queremos y muchas veces, nos lleva a conformarnos con lo que tenemos; con eso creo que debería bastar para ser felices, lamentablemente; no es así.

27 diciembre, 2012

...En la primavera llegaste...


En la primavera llegaste 
Como un sol radiante 
En diciembre nos dejaste 
Con las ganas de llorarte 

En la primavera llegaste 
Con una sonrisa brillante 
Espero poder recordarte
Y nunca llegar a olvidarte

En la primavera llegaste 
Con unos ojos gigantes
Tu personalidad impactante
Y mirada electrizante 

En la primavera llegaste...

En homenaje a Estefanía Marcano 
(1997-2012)

17 diciembre, 2012

...Amor de madre...

Ella era una mujer soberbia; quería interponerse entre todas las personas a su alrededor y que sus deseos fueran designios para aquellos que se relacionaban en su mundo. Su personalidad era dominante, entregada a su trabajo de manera incondicional y única, a tal punto que la figura de su hijo de cinco años quedaba relegada a un segundo plano. 

Esa noche todo era distinto y por eso estaba aterrorizada. Estaba atada de manos y pies a un catre de alambre. Una cadena le atravesaba la boca a modo de mordaza y su ropa estaba totalmente rasgada. 

A las puntas de la estructura metálica, se ajustaban unos cables conductores que cada cinco minutos la hacían sentir el paso de la electricidad por toda su humanidad. Gritaba, se retorcía y sus músculos se tensaban de manera esporádica. Su mayor miedo, su hijo estaba encerrado en una jaula viendo todo el espectáculo.

El verdugo la veía directamente a los ojos, disfrutaba y saltaba de emoción al ver como sus huesos parecían iluminarse por el paso de la electricidad. Para darle mayor picardía al asunto, buscó una navaja y le hizo pequeños cortes por las costillas; y después de cada descarga la bañaba en agua salada; no solo para que la electricidad tuviera mayor conducción sino hacer que sus heridas parecieran encenderse en fuego. 

Ese hombre solo esperaba que aquella mujer, al que consideraba estar maldita, reconociera su amor de madre y admitiera que le aterrorizaba que a su pequeño le pasara algo. Pero eso nunca iba a suceder, su orgullo no se lo iba a permitir. 

Una medida extrema se le ocurrió al verdugo. Sacó al niño de la jaula. Desató a la mujer y le puso a su hijo en brazos, finalmente los sentimientos maternos afloraron y comenzó a llorar sin parar. Minutos después, ambos lloraban al unísono. La madre finalmente cayó en cuenta cuanto necesitaba ese pequeño cuerpo junto a ella. 

En ese momento, y antes de expresarlo con palabras, un disparo iluminó la habitación y cortó el aire. Ya el niño no respiraba y le faltaba media parte de la cara. El asesino lo había matado a sangre fría, sin pensarlo y sin vacilar, ahora la mujer gritaba con las manos ensangrentadas sosteniendo lo que quedaba de la cabeza de su hijo.

-Finalmente aprendiste lo que es amor de madre, lástima que tuve que hacer esto para que te dieras cuenta lo que es realmente necesitar, querer y proteger a alguien. Te dejaré vivir para que esta lección te quede para toda tu existencia-, esas palabras le hicieron más daño que cualquier cuchillo o electricidad. Mientras su captor la liberaba y se iba de la habitación, esa mujer había aprendido, ya muy tarde, la verdadera naturaleza de la vida. 

13 diciembre, 2012

...Maradona: El Mesías de una época, el Jesucristo de muchos...

Foto tomada del reportaje: El mundial de Maradona
by JotDown
“Si Jesús tropezó, por qué Él (Maradona) no habría de hacerlo”, Rodrigo en “La Mano de Dios”, canción del año 2000. 

Diego Armando Maradona, “El Pibe de Oro”, “El Pelusa”, “El Diego” o simplemente Maradona, así se le conoce al argentino que desde los 10 años comenzó a brillar en el potrero con sus trucos, hazañas y picardía para tratar al balón de cuero, hasta el punto de ser hoy en día un Mesías para muchos fanáticos de la camiseta albiceleste y del balompié mundial. 

“El Diego” desde muy pequeño tenía una convicción, consagrarse con la selección absoluta y hacerla merecedora de una Copa del Mundo. Por esa razón, jugaba con pasión y con cualquier cosa que semejara a una pelota y así convertirse antes de los 15 años en El Milagro, como lo apodó el DT del Argentina Juniors cuando lo fue a ver en el campo donde todas las noches jugaba. 

Así empezó Maradona con su carrera, que ya es harto conocida por todos y no vale la pena volverla a contar en este texto; simplemente decir que con sus 1,66 metros de estatura ha enfrentado desafíos y se ha encarado él solo contra todo un equipo como lo hizo en México 86, cuando maniató a Inglaterra con dos goles para alimentar su orgullo deportivo y regalarle a su patria, la venganza por una guerra previa en Las Malvinas. 

Estos hechos lo han convertido en un Mesías, en un Jesucristo que arranca lágrimas de pasión, de orgullo patrio y admiración contagiosa para todos los que disfrutamos de una buena jugada del deporte mundial y decimos, como lo hizo el narrador de México 86 en medio de un éxtasis equiparable con un orgasmo: ¡El país con el puño apretado gritando por este gol, por Diegol...Gracias Dios, por el fútbol, por Maradona, por estas lágrimas! 

Sus hazañas son memorables y únicas. Sus jugadas quedaron para la posteridad, y han servido para borrar las cosas negativas de Diego Armando, que no es un marciano como lo calificó en una oportunidad su hermano, sino un ser humano con todo el derecho a equivocarse o caer en la cruz, como lo hizo Jesucristo en su momento para salvarnos a todos, así como salvó el 10 esa tarde a toda una nación cuando en México alzó la copa para darle la alegría a su país y colocar su firma en las páginas de la historia.

10 diciembre, 2012

...En 10 años...

¡Anoche te soñé! - ¿cómo estás?-; solo eso pude decirte después de estar cinco minutos enmudecido frente a ti. Tus ojos me escrutaban como aquella primera vez que te vi cara a cara y estabas molesta porque fui impuntual a la hora de irte a buscar al terminal aéreo. 

El ambiente era frío, la calidez de antaño se había extinguido. Ahora solo nos separaba una pequeña mesa que parecía tan gigante como el Gran Cañón de Colorado, la distancia entre los dos se había ampliado en los últimos meses y por eso, ambos callabamos. 

Un waffle de frutas estaba esperando por nosotros, pero ni tú ni yo nos atrevíamos a comerlo; no queríamos rozar nuestras manos. Con mis ojos, esos que siempre te escrutaron detalle a detalle, trataba de encontrar algún rincón que me recordara a la primera noche en que, como el taxista a la rubia; te besé hasta la sombra. 

Tu cuerpo denotaba el paso de los años; unas patas de gallo custodiaban tus parpados, la sonrisa que me gustaba de ti ahora poco la mostrabas y tu vientre abultado – que usé muchas veces para dormir – se había desinflado. Finalmente, con ese estilo característico de tu personalidad, me empujaste a hablar. ¿Y como por qué la cara fea, después de tener siglos sin hablar solo dices eso?; esa pregunta fue el empujón para que mi habla despertara para contarte, como en antaño, todo lo que me había ocurrido. 

Escuchaste de mi trabajo, de mi familia, te inquirí sobre tus dolencias que te llevaron a estar hospitalizada por varios días y de las que me enteré por mis contactos. Con ese pretexto, te conté de mis preocupaciones por ti e incluso, me atreví a tomar tus manos, pero como era de esperarse te apartaste. Traté de ser cariñoso pero te mostrabas como un objeto inanimado. 

Me hablaste como si estuvieras en medio de una de esas reuniones de trabajo, que casi a diario debías atender. Así, luego de unos quince minutos, te pedí nuevamente que me dieras una respuesta y fue la misma de los últimos meses: - En unos 10 años, tal vez-. Pediste la cuenta, y te fuiste no sin antes pasarme la mano por el cabello con un gesto maternal; -Sigues igual que siempre, no has cambiado nada-.

07 diciembre, 2012

...Las manos del pánico...

Todo era tan difuso y confuso, intentaba continuar nadando pero unas manos ocultas bajo el agua me frenaban. Mientras evitaba ser ahogado por un desconocido, el océano estaba en calma; las olas danzaban suavemente en la superficie y el agua parecía picada de diamantes por el reflejo de las estrellas en el mar. 

Una noche de cada semana, independientemente del día, me lanzaba al océano para nadar bajo la luz de la luna. Primero flotaba para ver la bóveda celeste, cerraba mis ojos y me sentía a la deriva dependiendo de los designios de la corriente. 

Luego comenzaba a desplazarme por la superficie, escuchando de vez en cuando el sonido del agua al chocar con alguna estructura o el ruido de un motor de algún bote pesquero. Ese era mi lugar de comodidad, un sitio de reflexión y de reencuentro con mis pensamientos como lo hacía en su momento aquel viejo que se dedicaba a pescar batallando con un gran pez solo con su caña, mente y balsa. 

Ese día todo era diferente, yo continuaba haciendo esfuerzos para no hundirme pero ya estaba cansado. Esas manos invisibles seguían en su tarea de ahogarme. La primera vez, cuando me sumergí completo en la oscuridad del mar, sentía como el aire se escapaba de mis pulmones para ser reemplazado por el agua, lancé patadas y pude salir a flote para respirar. 

Pero eso continuó, luego de unas dos veces más, todo había terminado. Me sentí derrotado y me dejé hacer, el agua salada inundó mi cuerpo para ir apagando mi vida poco a poco. Ya después de morir, nuevamente el mar estaba en calma, la corriente seguía su curso y la luna brillaba. 

Nadie escuchó mis gritos ni pudo salvarme, las manos del pánico habían acabado conmigo de la manera más terrible.

04 diciembre, 2012

Fun. – ¡We are young!

La banda de rock alternativo, Fun., radicada en Nueva York, Estados Unidos, lleva unos cuatro años en los escenarios y dos discos larga duración en su haber. El líder del grupo es  Nate Ruess, exintegrante de la desaparecida The Format, que luego de unos años como grupo decidió separarse para que cada integrante siguiera su camino. 

Con intenciones de crear melodías de rock suave y digerible por todos, Fun. lanzó su primer álbum bajo el título de "Aim and Ignite" en agosto de 2009, apoyados por una intensa campaña de promoción a través de su página web donde ofrecían todas sus canciones gratis e incluso algunas para Navidad. 

Gracias a la buena recepción de su primer sencillo "At Least I'm Not As Sad (As I Used To Be)", los chicos de Fun. emprendieron una intensa gira por el Reino Unido y fueron teloneros de la banda Paramore. A finales de 2010 continuaron con este recorrido europeo y a mediados de 2011, anunciaron que colaborarían con la cantante de R&B, Soul e indie pop, Janelle Monáe, relación de la que surgió una idea para posteriormente grabar en el segundo disco de la banda la canción “We are young”. 

Con intensas melodías grandilocuentes, tambores que recuerdan a una marcha militar, acompañamientos con la grandiosa voz de Monáe, coros que inyectan energía al recordarnos que “Somos jóvenes” y unos riffs de piano y guitarra, “We are young” ha sido una de las mejores canciones que he escuchado últimamente, y no quiero decir que sea perfecta a nivel de arreglos sino que es tan sencilla que resulta pegajosa y energética. 

En la actualidad, Fun. ha sido favorecido por la viralidad de Internet y la series de televisión, nicho donde la banda logró encontrar la promoción que necesitaba gracias al “musical” Glee, donde los chicos de la serie interpretaron su propia versión de “We are young” para llegar al número 1 de descargas en iTunes. A partir de allí, todo fue fácil, seis semanas en el tope de la cartelera Billboard y el uso de la canción en Gossip Girl, la serie juvenil 90210 y en un comercial promocional de la marca de automóviles Chevrolet le dieron la tan esperada fama a la banda neoyorquina. 

Análistas músicales, que comparan esta canción con la banda británica Queen, le atribuyen el éxito a “We Are Young” por la composición y letra simple de Ruess, quien con frases tan normales pero impactantes como ¡Tonight, We are young / So lets set the world on fire (Esta noche somos jóvenes / Entonces incendiemos el mundo) o My friends are in the bathroom getting higher than the Empire State (Mis amigos están en el baño drogándose tan alto como el Empire State) logra inyectarle a los fans una energía incomparable que pocas veces se consigue actualmente, en una banda de rock alternativo.


                                            Give me a second I  
I need to get my story straight  
My friends are in the bathroom getting higher than the Empire State  
My love she’s waiting for me  
Just across the bar  
My seat’s been taken by some sunglasses  
Asking bout’ a scar and 
I know I gave it to you months ago  
I know you’re trying to forget  
But between the drinks and subtle things  
The holes in my apologies  
You know I’m trying hard to take it back  
So if by the time the bar closes  
And you feel like falling down 
 I’ll carry you home 

Tonight  
We Are Young  
So let’s set the world on fire  
We can burn brighter  
Than the sun  (x2) 

Now I know that I’m not  
All that you got  
I guess that I  
I just thought  
Maybe we could find new ways to fall apart  
But our friends are back  
So let’s raise a cup  
Cause I found someone to carry me home  

Tonight  
We Are Young  
So let’s set the world on fire  
We can burn brighter  
Than the sun (x2) 

Carry me home tonight  
Just carry me home tonight  
Carry me home tonight  
Just carry me home tonight  

The world is on my side 
I have no reason to run  
So will someone come and carry me home tonight  
The angels never arrived  
But I can hear the choir  
So will someone come and carry me home  

Tonight  We Are Young  
So let’s set the world on fire  
We can burn brighter  Than the sun (x2) 

So if by the time the bar closes  
And you feel like falling down  
I’ll carry you home tonight

30 noviembre, 2012

Libros: “Travesuras de una niña mala” de Mario Vargas Llosa

¿Cuál es el verdadero rostro del amor? Ricardo ve cumplido, a una edad muy temprana, el sueño que en su Lima natal alimentó desde que tenía uso de razón: vivir en París. Pero el rencuentro con un amor de adolescencia lo cambiará todo. La joven, inconformista, aventurera, pragmática e inquieta, lo arrastrará fuera del pequeño mundo de sus ambiciones. Testigos de épocas convulsas y florecientes en ciudades como Londres, París, Tokio o Madrid, que aquí son mucho más que escenarios, ambos personajes verán sus vidas entrelazarse sin llegar a coincidir del todo. Sin embargo, esta danza de encuentros y desencuentros hará crecer la intensidad del relato página a página hasta propiciar una verdadera fusión del lector con el universo emocional de los protagonistas. Creando una admirable tensión entre lo cómico y lo trágico, Mario Vargas Llosa juega con la realidad y la ficción para liberar una historia en la que el amor se nos muestra indefinible, dueño de mil caras, como la niña mala. Pasión y distancia, azar y destino, dolor y disfrute... ¿Cuál es el verdadero rostro del amor? 

Confieso que hasta ahora me había inclinado hacia el trabajo de opinión y análisis político del peruano, nobel de Literatura, Mario Vargas Llosa; que con “Travesuras de una niña mala” causó un punto de inflexión en mi admiración por su trabajo literario. 

Vargas Llosa, en esta obra de unas 400 páginas, logra intervenir en la psique del lector masculino para advertir la verdadera naturaleza de muchas mujeres, esas ninfas que piensan que están en el mundo con el único fin de lograr sus objetivos a costa de sus amantes, algunos de ellos embobados por una belleza fuera de lo común y que estarán allí como unos perros día tras día esperando por un sí que no llegará, porque eso es el supuesto amor, una batalla de personalidades donde al final gana la más poderosa para mantener una relación. 

La “niña mala”, protagonista del libro publicado en 2006; se torna en un personaje camaleónico que puede causar efectos dispares dependiendo del sexo de quien se sumerja en las letras del creador de “La Ciudad y los perros”. En mi caso, por ser hombre, experimenté cierta rabia al ver como la dama en cuestión jugaba con los sentimientos y emociones del protagonista al que calificaba de pelele, pero siempre le pedía algún piropo para sentirse bella y deseada. 

A medida que avanza la lectura, y es una de las maestrías de Vargas Llosa, se puede identificar en la “niña mala” a todas esas mujeres que han pasado por la vida de ciertos hombres -algunas siguen aún allí, como la que me recomendó el libro en cierto momento- para convertirla en un juego donde los deseos y las ganas están a flor de piel en algunas oportunidades, para luego esfumarse hacia un escenario donde nada se concretará para pesar del amante, que busca no solo tener sexo con ellas sino darle todo lo que una “buena” mujer se merece. 

Este tipo de mujeres, generalmente se dejan llevar por la ambición y casi nunca aceptan a su lado a un hombre sencillo, con buenos deseos y sentimientos; sino más bien abrazan a un acompañante dominante que las trate mal pero que les de todo lo que, según ellas, se merecen; como en el caso de la “niña mala”.

“Travesuras de una niña mala” puede llegar a convertirse en un libro de cabecera para los que, como en mi caso, han pasado por relaciones tormentosas e infinitas que resultan en encuentros idílicos e imposibles, donde la mujer se convierte en un ser dominante sin sentimientos definidos, o más bien los oculta para protegerse. Por eso hay que leer esta obra maestra del peruano Vargas Llosa, porque de ese tipo de parejas está llena el mundo, “parejas perfectas de una sádica y un masoquista”.

27 noviembre, 2012

...Carta 2012 al Niño Jesús...

Hace 20 años, una mañana del 27 de noviembre de 1992, aproveché para escribirle una carta al Niño Jesús en vista que las clases en Venezuela habían sido suspendidas por la inestabilidad social generada por una nueva intentona golpista para derrocar al gobierno de Carlos Andrés Pérez. 

Hoy, luego de muchos días vividos, arrugas en mi cuerpo, el peso de la madurez y cambios en mi mundo, vuelvo a tomar esta fecha para tener una pequeña conversación epistolar con el hijo de María. Primero debo agradecer por el año que está por finalizar. 

Finalmente, como lo espera toda persona que está saliendo de los inicios de la etapa adulta para entrar de lleno en el desarrollo de la vida, sigo echando las bases para un futuro óptimo junto a una persona que me complementa, me ayuda, me ha servido de mano de apoyo y me ha demostrado todos los días que existe más que cariño en cada una de sus acciones. 

En el tema laboral, sigo pensando en ese objetivo final que en la actualidad le quita el sueño a más de uno, un proyecto que me sirva para independizarme y así cortar de una vez los lazos con el empleador, porque de algún modo u otro esa es una nueva forma de esclavitud en pleno siglo XXI; y a veces resulta intolerable por estar llena de injusticias, presiones e intensidad para imponer puntos de vista; la mayoría de la veces, erróneos. 

Por eso, para el año que viene, y ahora sí dejaré al niño interno que tengo para pedir algunos regalos, espero poder continuar cosechando éxitos y cosas para equipar mi nuevo hogar. Quiero también allanar el camino para conseguir un automóvil, y así, tener todo listo para sellar un compromiso que he venido buscando desde hace mucho tiempo y que al parecer, tiene ya todos los ingredientes para ser realidad. 

Mientras tanto, para mi familia, allegados y novia, deseo que tengan todo lo mejor del mundo; salud, bienestar, dinero y vida para compartir juntos. Todo lo demás vendrá poco a poco, por ahora, eso es todo Niño Jesús. Te espero el 24 de diciembre.

24 noviembre, 2012

...Amor interno...

La acosté sobre una larga mesa. La luz blanca iluminaba cada rincón de su cuerpo desnudo. Podía ver en detalle sus poros, las arrugas que le había causado el pasar de los años y sus músculos rígidos por el efecto del rígor mortis. 

Aún recordaba todas las noches que pasé en mi cama junto a ella. Por esa razón, quise sentir en mi boca ese sabor agridulce que todos los días me dio por casi cinco años. Al acercar mis labios a su piel, un frío mortuorio me atravesó los nervios. 

Lamí su cuello, besé su boca y tomé con mis dientes la punta de sus senos e imaginé que estaban calientes. Mi lengua continuó recorriendo el canal formado en medio de su vientre, hurgué en su ombligo y bajé a su entrepierna. Estaba completamente seca de muerte, nada reaccionaba a mis caricias y mucho menos el aire se cortaba por sus gemidos, todo permanecía en silencio. 

Seguí besando allí para humedecer un poco, inserté dos dedos pero fue como arar en tierra seca. Acaricié sus piernas, besé sus pies y luego volví a su cara. Le regalé unos besos en la punta de la nariz, los parpados y las mejillas. Al tratar de hacerle el amor, me uní a su cuerpo pero no fue como esperaba, todo era rigidez, piel cerrada y ni una sola respiración acelerada. 

Ella seguía muerta. Quería conservarla para siempre junto a mi. Busqué un bisturí debajo de la mesa, abrí su pecho y luego con unas tenazas pude romper su caja torácica. Aún su corazón estaba húmedo, algún resto de vida quedaba. Lo arranqué y lo probé, sabía a carne cruda. Mis labios se llenaron de su sangre y sentí que nuevamente mi amante de toda la vida estaba dentro de mi. Al final, nada quedó de ella, solo su presencia en cada rincón de mi cuerpo.

21 noviembre, 2012

...Mitad...

Sabes que no pido mucho. Con una parte de tu cuerpo me conformo para ser feliz y encontrar la manera de lograr todos los objetivos que nos hemos planteado. 

Uno de tus ojos me permite estar atento a mi entorno. A través de él puedo ver los cambios que ocurren en nuestro mundo; en ese pequeño círculo café - que es la puerta a tu alma – me reflejo e imagino todas las cosas buenas que aún están por venir. 

Sujétate firmemente a la vida con una de tus manos, dame la otra para agarrarme a ti y caminar juntos por el mundo, atarme a tus cinco dedos, para sentir cuando estás asustada, quieres ser libre o necesitas sostenerme para estar acompañada. 

Una de las cosas que me gustan de ti, son tus besos. Con la mitad de tus labios me siento cómodo, tienen la misma dulzura, una forma perfecta y me regalan el sonido de tu voz. 

El resto de tu cuerpo siempre tendrá que dividirse entre nuestros futuros hijos y yo. Uno de tus senos lo alimentará, parte de tu vientre será su cuna por nueve meses y una de tus piernas lo ayudará a andar y será base para llevarlo por la vida. 

Puedo decir entonces, que soy feliz contigo y parte de tu cuerpo, ¿quieres mi mitad?

18 noviembre, 2012

...Unión clandestina...

Llevaban horas rodando en la carretera. La parte trasera del bus donde ellos estaban para aprovechar de dormir, había quedado desierta luego de la última parada en la que la mayoría de los pasajeros se quedaron para seguir su camino. 

La chica estaba acostumbrada a ese tipo de viajes; por ello casi siempre llevaba unos pantalones cortos para lucir sus duras piernas y recibir masajes de su chico cuando estuviera cansada. Para completar su atuendo; tenía un suéter tres tallas más grandes y el pelo hecho en una cola que le permitía “oxigenar” su cuello. 

Los minutos; las horas pasaban, y solo la noche oscura los acompañaba junto al zumbido de algún otro vehículo que pasaba en la dirección contraria a toda velocidad, haciendo cambio de luces para advertirle al conductor del colectivo su presencia. Las manos de la pareja estaban entrelazadas, en algunas oportunidades sus dedos jugaban y de vez en cuando se besaban en la frente, los ojos, los labios, las orejas; en cualquier sitio de sus caras para distraerse y darse compañía. 

Las travesuras entre ambos fueron subiendo de tono. Él comenzó a acariciar las piernas de la chica, tocarlas como si las estuviera moldeando con sus manos y al llegar a la cara interna de sus muslos, se atrevió a rozar esas zonas que hicieron que ese cuerpo se tensara. Mientras los pocos pasajeros del bus estaban durmiendo, ellos continuaron buscando diversión. 

Ella deslizó sus dedos por debajo del pantalón del chico, buscó como una mujer en su primera noche y comenzó a acariciar aquella virilidad que fue creciendo en sus manos en tamaño y temperatura. Luego de unos minutos consiguió lo que quería. 

Lentamente se acostó sobre las piernas de su, ahora amante y con su boca decidió seducir a su chico, abrió el cierre y comenzó a besar aquel miembro. Imaginó todas las veces que él lo había deseado, y ahora lo estaba complaciendo. Mientras ella seguía acostada, él pudo meter su mano bajo su abrigo para tocar sus senos tensos por el frío del bus, su vientre y su ombligo. 

Finalmente, ella no pudo contenerse y sin pensarlo bajó un poco sus pantalones y lentamente se sentó sobre la virilidad de su acompañante. La velocidad del transporte, las curvas de la carretera y algunas pisadas en el freno hicieron el resto. 

La chica se sostenía del respaldar del asiento mientras él aún tenía sus manos apretando fuertemente sus senos. Finalmente, los dos experimentaron un placer indescriptible descubriendo las bondades de una unión clandestina.

15 noviembre, 2012

12 noviembre, 2012

...Quince Minutos...

Todos los días, por quince minutos, olvido todo lo que ocurre a mi alrededor. Ella es una maestra en seducción; maquilla sus grandes ojos, ilumina sus mejillas con rubor, le da brillo a sus labios y oculta un poco sus ojeras, sea con máscara o unos lentes oscuros. 

Mientras el autobús se desplaza, ella sin saberlo pasa de ser una mujer natural a una chica sexy. Van cinco minutos de recorrido; peina sus negros cabellos y se perfuma como si estuviera en su casa; no le importa la gente alrededor. Su mirada es fría, su cara no demuestra ningún sentimiento y mucho menos una sonrisa. Continúa con sus labores de belleza, y eso es lo que la convierte en una chica sexual, la sencillez y naturalidad con la que actúa. 

A los 10 minutos ya está lista. Termina de arreglar su cabello, guarda sus instrumentos de maquillaje, saca un espejo esperando el resultado y finalmente, ¡sonríe!, al parecer le gusta lo que ve. Mientras tanto la sigo observando y su aroma me aturde; escucho que hemos llegado al terminal. 

La persigo por unos momentos. Trato de caminar a su paso para notar su cuerpo; tiene curvas que me parecen perfectas: caderas pronunciadas, vientre un poco abultado y senos medianos. Ella no nota que la observo sino que camina a su destino como si flotara por encima de todos los que la rodeamos. 

Vamos hacia el mismo destino, nuevamente estamos un poco cerca. La veo por última vez mientras se aleja a su oficina. Han pasado quince minutos, los mejores del día y un momento que rápidamente olvido. Llego a mi trabajo y me sumerjo en mis obligaciones, ya al mediodía no recuerdo a esa chica. Tal vez mañana, vuelva a vivir otros quince minutos.

08 noviembre, 2012

...Tiempo suspendido...

La antigua casa era una ventana a un tiempo que no volvería. Entre los viejos árboles que daban sombra en el patio, aún se podían escuchar los cacareos y chillidos de las aves de corral que en otro momento le daban alegría a todos los alrededores. 

Allí en el solar, como se le suele decir en los llanos venezolanos a ese espacio, solo quedaban las sillas oxidadas donde hace muchos años todos los primos de la familia se reunían para tomarse fotos, beber varias cajas de cerveza y contarse cosas del pasado. 

Como en una novela de García Márquez, un viejo loro que correteaba por el techo de la casa gritaba improperios y alertaba a los dueños de la casa cuando estaba por caer un mango; uno de esos que a veces estallaban contra el piso o caían sobre los visitantes para ahuyentarlos para siempre y hacerlos desistir de cortejar a una de las nietas de Juana, la matrona de la familia. 

En los atardeceres calurosos, cuando Juana recorría los cuartos vacíos de sus hijos para recordar momentos de la infancia, la casa hacía un recorrido atrás en el tiempo y se llenaba de sombras y fantasmas. Una mañana mientras tomaba el café sentada en su silla rota de mimbre, vio desde la puerta principal como su esposo; muerto hace varios años; caminaba de acá para allá despotricando contra sus hijos que no hacían bien las tareas. 

Otro día, cuando salía al patio a escuchar a los pájaros pudo observar a su madre, que había muerto muchos años atrás, parada frente a la batea lavando los pañales de tela “cagaos”, escuchando canciones de Gardel, peleando con el perro que danzaba de allá para acá jugueteando con las chispas de agua que caían. 

Esa casa colonial, llena de recuerdos y espíritus mantenían a Juana presa de la realidad y ahogada en la fantasía de sus recuerdos, alojados en su mente y en un tiempo suspendido; que solo se liberará cuando la anciana decida tomar la mano de su esposo para irse caminando a uno de los rincones de su antiguo hogar y alejarse del mundo terrenal.

05 noviembre, 2012

Entrevista imaginaria a Dios, un encuentro con nuestro supuesto creador


Sabía muy bien a donde iba, a pesar que mi lugar de destino no parecía bien definido. La carretera estaba rodeada a sus dos lados de una vasta llanura, riachuelos lejanos con el sonido relajante de sus cauces y algún que otro animal que vivía en esos campos al aire libre.

Mi camino era una recta de asfalto que atravesaba el campo hasta el horizonte coronado por montañas. Mientras avanzaba pensé nuevamente en el motivo de mi viaje; encontrar y entrevistar a un personaje que jamás se me habría ocurrido conocer, pero gracias a las cosas de la vida me concedió la posibilidad de regalarme unos cuantos minutos de su tiempo.

Finalmente, luego de unas cuantas horas de viaje, llegué a la selva amazónica. Allí me recibió el verdor de la selva, los sonidos de los animales salvajes, la calma de las aguas de los ríos que fluyen en la zona desde el inicio de los tiempos y los picos de las montañas más primitivas del planeta. Dudé un instante, pero ese era el espacio indicado para conocer a mi entrevistado, de ese modo él me mostraría el fruto de su mano creadora.

De acuerdo a lo pautado, nos reuniríamos en el "techo del Roraima", una de las montañas más altas de la selva. Pedí un paseo en helicóptero; aproveché la oportunidad para observar el agua inacabable del Salto Ángel, la punta de los tepuyes y el Río Amazonas, una lengua de agua que parecía infinita a través de toda la selva. Unos minutos después de estar viendo la majestuosidad del mundo, pedí que me dejaran en un paraje cercano para esperar a mi entrevistado.

No sé cuánto tiempo esperé; creo que dormí un rato descansando bajo un árbol. Inesperadamente un toque en el hombro me despertó y allí estaba con quien iba a conversar. Mi mente no daba crédito a mis ojos, ante mi estaba alguien que parecía mi gemelo; salvo vestido por completo de blanco y descalzo.

Lo detallé nuevamente y efectivamente era mi doble, pero tenía algo diferente e irradiaba una energía que nunca había sentido, su ropa y su cuerpo emanaban un aroma a flores.

- ¿Eres tú a quien esperaba?-, le dije mientras buscaba la grabadora en mi bolso para colocarla entre nosotros dos. Él ya se había sentado a mi lado y me miraba fijamente.

-Depende de lo que quieras creer. Por fuera soy igual que tú porque soy parte de ti, y tú eres parte de mi. Todos los que habitamos en la tierra estamos conectados-, con esa evasiva me respondió, me dio una palmada en el hombro y sonrió. -Sí soy el que esperabas ver, solo que estás impresionado porque decidí presentarme a tu imagen y semejanza.-

El sol brillaba entre las hojas de los árboles, el cauce de los afluentes cercanos le daba serenidad al lugar donde estábamos sentados y el canto de las aves musicalizaban la conversación con mi invitado.

Luego de unos minutos, mi confusión ya estaba pasando para concentrarme en la razón del encuentro que habíamos pautado. Debía realizar una entrevista y concretar preguntas que aclaran no solo mis ideas sino la de muchas personas. -¿De qué manera puedo llamarte?, tienes demasiados nombres y aún no sé cuál elegir para que conversemos.-

-Simplemente Dios. Tengo muchos nombres como el Creador, el omnipotente, Alá, Yavé, Santísima Trinidad y otros más dependiendo de la cultura. Parece que quisieran separarme y convertirme en seres distintos; no han entendido que soy uno y todos a la vez-.

Eso debe ser difícil, ser uno y todos a la vez. Tienes exigencias, deberes, tareas, derechos; ¿Qué es lo más complicado de ser Dios?

Mientras pensaba su respuesta, tomó una rama para dibujar en la tierra como lo hace un niño. Miraba ensimismado el suelo y hablaba en voz baja, finalmente se dirigió hacia mi. - Creo que escuchar a todas las personas del planeta es lo más difícil. Entender al ser humano se ha convertido en algo tedioso; prestar atención a sus oraciones me lleva demasiado tiempo-.

-Menos mal hay muchos como tú, que no rezan mucho-, me dijo con tono de reproche y me golpeó suavemente en el hombro como lo hace un amigo cuando te dice un chiste sarcástico. -Sin embargo, hay otros que se han convertido en puras exigencias, me ven como un ticket de lotería que buscan para resolver todos sus problemas y se olvidan que la solución está en ellos mismos. El ser humano cada día es más complicado, no pensé que crearlo sería para mi un trabajo infinito a largo plazo, parecen niños que siempre estaré criando y llevando de la mano; incapaces de cuidarse por si mismos. No pensé que ser Padre de todos me traería tantas obligaciones-, rió para sus adentros.

Ahora que mencionas que los humanos somos como niños; ¿Dios aprieta pero no ahorca?, qué hay de cierto en ese dicho. Seguramente a más de uno le habrás querido halar las orejas y ponerlo en su sitio. ¿Te arrepientes de habernos creado?. - Esta pregunta me costó hacerla, porque esperaba que me dijera que se arrepentía de crearme o me recordara esos momentos en que sentí que alguien me juzgó por mis errores.

-A veces quisiera apretar más, pero esa es una de las virtudes de ser Dios; la paciencia y la comprensión. No niego que en muchas oportunidades he usado distintos mecanismos para colocar en su sitio algunos; aunque al final sus mismos pensamientos y su mente se encargan de hacer lo que yo inicio-, caviló un poco mientras con sus manos terminaba de delinear el dibujo que había hecho en la tierra.

-¿Arrepentirme de haberlos creado?, jamás; porque ustedes son mi creación más perfecta, aunque sí han ocurrido cosas que me hacen reconsiderar por qué les di tanta capacidad para pensar y ser independientes. Algunos han usado lo bueno que les di para creer que son mis representantes y causar en la tierra un daño inimaginable.-

En ese momento, una suave llovizna comenzó a caer en la selva para empaparnos lentamente. La copa de los árboles hacían el papel de un paraguas natural mientras seguíamos hablando. Pensé en Hitler, Stalin y otros dictadores que se endiosaron durante sus mandatos, pero preferí llevar la entrevista a otro punto.

Ese es un buen punto, y tal vez te parezca mal esta pregunta pero ¿Dónde dice que la Iglesia y sus sacerdotes representan a Dios en la tierra?, citaré a una canción de un cantante latinoamericano“...es más que un templo de lujo con tendencia barroca; Él sabe que total a la larga esto no es más que roca”, ¿Una Iglesia es solo rocas o es importante para el hombre?

-Te responderé con parte de la letra de la misma canción; por cierto, debí cobrarle a Ricardo por las regalías porque es muy buena-, tarareó un rato la melodía: -“La Iglesia se lleva en el alma y en los actos, no se te olvide”; los sacerdotes son creados por mi y no tienen nada de especial, simplemente han estudiado más acerca de mi que otros pero no los hace merecedores de llevar mi palabra por el mundo. Prefiero un ateo que busque entrevistarme para entender mi mensaje a un obispo que solo se da golpes de pecho porque así se lo dice su “profesión”.-

Sentí que nuestro encuentro se había extendido, pero por alguna razón el tiempo estaba congelado. Era hora de ir cerrando las preguntas y permitirle a Él continuar con su arduo trabajo. ¿Alguna vez aparecerás ante todos en la Tierra o prefieres que tus hijos sigan a la deriva en el planeta?

-Aún no lo sé, prefiero mantenerme en el anonimato; imagínate, si me aparezco con este cuerpo todos saldrán corriendo asustados- bromeó entre risas. - Mis hijos no están preparados para verme, aún no entienden que no es necesario que me vean para que sientan mi presencia dentro de ellos y puedan conversar conmigo; que al final es una meditación con ellos mismos.

-Por ahora deben aprender por si solos y mantenerse como dices, a la deriva. Sabiamente les di la capacidad para ser los únicos animales que tropiezan con la misma piedra varias veces, para que aprendan de sus errores y cuando mueran, lleguen a mi lado llenos de sabiduría gracias a todas esas experiencias.-

Ese fue el mejor mensaje que Él me pudo dejar, pensé en la manera de despedirlo pero la lluvia comenzó a caer más fuerte y un gran trueno hizo que el suelo se moviera. Pensé que un diluvio universal caería sobre nosotros,

¿Se te ocurrió un nuevo diluvio universal?, le pregunté; pero no me dio tiempo de responder porque en ese momento otro trueno me despertó de un sueño. Al parecer todo había estado en mi imaginación, aunque en lo más alto de los tepuyes, brillaba el arco iris que parecía conectar cada una de esas montañas para caminar sobre ellas. Algunas gotas caían de las hojas y mi ropa estaba completamente empapada, al parecer; mi mente había vagado entre la realidad y un sueño.

02 noviembre, 2012

Radical Face – Welcome Home (la canción de Nikon)

Ben Cooper es el cantante y creador del proyecto indie américano “Radical Face”. Esta propuesta experimental, se creó en 2010 cuando Cooper lanzó su primera placa de corta duración con seis canciones.

Basado en sus experiencias previas en el grupo indie “Electric President”, Cooper crea con su guitarra, pianos y sonidos de ambiente atmósferas para un viaje en cada una de las notas que produce.

En Radical Face, propuesta que tomó el nombre de un volante de una oferta de cirugía plástica – Radical Face Lifting (Estiramiento radical de la cara) – Cooper se aproxima al “dream pop”, la corriente músical que no se basa en la letra o melodía de la canción sino en los sonidos.

En su carrera, Radical Face ha lanzado tres discos de corta duración y tres álbumes; The Junkyard Chandelier, Ghost y The Family Tree: The Roots; y su trabajo musical ha logrado colarse en varias películas, comerciales y festivales de cine.

Su sencillo más conocido es “Welcome Home”, canción que se dio a conocer en Europa gracias a un anuncio de Nikon que usaba el riff principal de fondo. Esta melodía también apareció en un comercial del Chevrolet Volt 2011; la película Humboldt County. Varios documentales han ayudado, por su parte, a difundir el trabajo de Cooper con Radical Face.

Esta canción llegó al puesto 59 de la cartelera británica, y aunque poco se conoce de esta banda en América Latina, es un proyecto que abraza corrientes y sonidos para crear melodías que resultan universales para ser escuchadas en cualquier rincón del planeta y aceptarlas como una joya musical de gran factura.

Para conocer más de esta banda, acá su página oficial 



Sleep don't visit, so I choke on sun 
And the days blur into one 
And the backs of my eyes hum with things I've never done 

Sheets are swaying from an old clothesline 
Like a row of captured ghosts over old dead grass 
Was never much but we made the most 
Welcome home 

Ships are launching from my chest 
Some have names but most do not If you find one, please let me know what piece I've lost 

Heal the scars from off my back 
I don't need them anymore 
You can throw them out or keep them in your mason jars 
I've come home 

All my nightmares escaped my head 
Bar the door, please don't let them in 
You were never supposed to leave 
Now my head's splitting at the seams 
And I don't know if I can 
Here, beneath my lungs, I feel your thumbs press into my skin again

30 octubre, 2012

...Poema: Redes malvadas...


Respiro oculto en tu cuerpo 
Mientras siento las líneas de tus curvas 
Recorro cada poro con mis dedos 
Buscando el lado oculto de tus senos 

Te desnudo con una mirada lasciva 
Pensando en qué hacer con tu ropa 
Dejarla caer lenta y suavemente 
O arrancarla por la fuerza que me arropa 

Tu piel virginal ya está frente a mi 
Con un aroma que me embriaga 
Mis sentidos no pueden contra ti...

Al final muero en tus redes malvadas

27 octubre, 2012

Película “Intouchables”: Amigos dispares que resultan inseparables


Dirección y guion: Eric Toledano y Olivier Nakache. 
País: Francia. 
Año: 2011. 
Duración: 115 min. 
Interpretación: François Cluzet (Philippe),Omar Sy (Driss), Audrey Fleurot (Magalie), Anne Le Ny (Yvonne), Clotilde Mollet (Marcelle), Alba Gaïa Bellugi (Elisa), Cyril Mendy (Adama), Christian Ameri (Albert). 
Música: Ludovico Einaudi. 

Tras un accidente de parapente, Philippe, un rico aristócrata, contrata a Driss como asistente y cuidador, un joven procedente de un barrio de viviendas públicas que ha salido recientemente de prisión —en otras palabras, la persona menos indicada para el trabajo—. Juntos van a mezclar a Vivaldi y “Earth, Wind & Fire”, la dicción elegante y la jerga callejera, los trajes y los pantalones informalesl. Dos mundos van a chocar y van a tener que entenderse mutuamente para dar lugar a una amistad tan demencial, cómica y sólida como inesperada, una relación singular que genera energía y los hace… ¡intocables! 

El largometraje francés de 2011, Intouchables (conocida como Amigos Inseparables en América Latina), involucra al público en una relación de amistad dispar entre Phillipe, un paciente parapléjico, y Driss, un joven sin experiencia contratado para darle los cuidados que necesita. 

Desde el inicio, con las notas de la banda sonora del piano del músico clásico contemporaneo, Ludovico Einaudi; la película se enmarca en una hermosa fotografía de las noches de París llena de carros lujosos, calles iluminadas de tonos amarillos y los sonidos nocturnos, un ambiente donde se desarrollarán los momentos más importantes de los protagonistas y confesarán sus miedos, sueños y secretos; para comenzar así una relación profunda de amistad. 

La historia plasmada en “Intouchables”, basada en hechos reales, muestra no solo el sufrimiento por el que pasa una persona prácticamente paralizada en su totalidad, sino los deseos que guarda y las ganas que aún tiene de vivir y gozar de la vida. Ese es el caso de Phillipe, quien al lado de su cuidador descubre las bondades del mundo que aún existen para él. 

Esta obra, que se convirtió en la más taquillera de la cinematografía francesa apenas a dos semanas de su estreno, le permite a los espectadores reflexionar acerca de la vida de un enfermo con estas condiciones y cómo ayudarlos, no solo desde el punto de vista médico sino humanitario, tratándolos primero como personas que aún desean, viven, sienten y padecen; y necesitan de algún modo salir de la postración para conocer el mundo desde otro punto de vista.


23 octubre, 2012

...Minutos finales...

No todo había resultado tan sencillo como esperaba. Allí estaba yo empuñando el arma, apuntándole directo a los ojos y aun así no podía disparar. 

Su cuerpo a pesar de la paliza que le di minutos antes, lucía hermoso. Sus curvas se marcaban por debajo de la franela ensangrentada, sus ojos brillaban como el crepitar de las llamas y sus piernas aún eran esos dos pilares que hace años fueron la base y la columna vertebral de mi vida. 

Guardé la pistola y me senté a su lado. Me confesé ante ella, le susurré al oído cosas de mi presente y de mi pasado. Le estaba hablando como si fuera una muñeca de papel arrugada, a la que pudiera alisar con palabras. 

Ella estaba estática, inmutable ante mis palabras, fría a mis caricias y con una naturaleza salvaje encendida en su mirada. Quería decirle cosas que estaban escondidas en mi ser, pero un disparo sordo me sacó del éxtasis. 

De mi estomago brotaba sangre y en sus manos estaba la pistola humeante, había usado las últimas fuerzas y lo que le restaba de valor para matarme. Siempre decidida, había hecho lo que yo no pude hacer. Minutos más tarde...ella también murió a mi lado.

18 octubre, 2012

¿Por qué no?

Al ver las manifestaciones de un grupo de jóvenes quejándose por los pasados resultados electorales, argumentando que estamos en dictadura y pidiéndole a los venezolanos que desconocieran la Constitución; no pude evitar pensar en mi abuelo y en sus ideales. 

Él era un verdadero comunista; nunca le celebró a mi padre un cumpleaños, visitó la antigua URSS (Unión Soviética) y en su casa reposaba una figurilla de Lenin que aún conservo. No disponía de placeres mundanos para sus hijos y se dice, entre comentarios de familia, que le dio hospedaje en su momento al mentado Che Guevara. 

Esa era su vida y en ella involucró a todos; mi abuela era la gestora de una posada improvisada para líderes de la izquierda de la época que buscaban refugio y a cambio, le enseñaban parte de su intelectualidad a los niños. Uno de ellos; mi tío, formó parte de la guerrilla estudiantil del estado Mérida y mi padre, él se encargaba en algunas oportunidades de hacerle promoción al Partido Comunista Venezolano (PCV) y de darle “algunas ayudas” a mi abuelo. 

Humberto, como se llamaba mi progenitor, cuando era niño se montaba en un camión por las calles de su pueblo natal y megáfono en mano vitoreaba: ¡Por los camiones vecinales, vota rojo!; aún era muy pequeño para saber leer algunas palabras y realmente quería decir ¡Por los caminos vecinales, vota rojo!, instando a votar por el PCV y la izquierda venezolana. 

Otra de sus actividades de infancia era ayudar a sus familiares cuando estaban detenidos en la cárcel de la ciudad por sus actividades de izquierda; en ese momento la dictadura perseguía a todos los disidentes con su Seguridad Nacional y los sometía a todo tipo de torturas. Por ello mi padre iba con sus primos a las casas contiguas a las celdas, donde echaban veneno para las hormigas en los hormigueros; insectos que eran llamados por la policía al colocar azúcar en los testículos de sus torturados que eran obligados a sentarse desnudos en la tierra. 

Mi abuelo muchas veces tuvo un caucho de camión sobre su pecho, su primo murió de neumonía porque varias veces lo acostaron sobre una panela de hielo y así varios sufrieron de la dictadura tan solo por pensar diferente, desear algo mejor para el país y, aunque fueron torturados, seguían con sus actividades disidentes. 

Por eso, al ver a los jóvenes que protestaban por los resultados electorales calificando al gobierno como una dictadura, quisiera escuchar a mi abuelo. Seguramente pediría que les echaran planazos para enseñarles la verdadera represión..., sí, tal vez eso haría falta en Venezuela otra vez; ¿por qué no?

15 octubre, 2012

Blog Action Day 2012: El poder de nosotros

Este 15 de octubre, como en los últimos seis años, se celebra el Blog Action Day para reunir a blogueros de todo el mundo en torno a un tema en específico y desarrollarlo desde el punto de vista de miles de personas que a través de sus ideas, se expresan en estos nichos virtuales llamados blogs.

En este 2012, la iniciativa ha surgido en la necesidad de darle una ventana a organizaciones, grupos sociales, o personas trabajando en conjunto para conseguir una meta u objetivo que nos beneficie a todos; en fin, "el poder de nosotros" para cambiar la manera en como vivimos en este planeta. 

Playing for Change, es una fundación musical creada por el productor Mark Johnson a partir de una idea que le surgió luego de grabar al cantante folk estadounidense Roger Ridley, mientras interpretaba la famosa canción "Stand by me" de Ben E. King. A partir de esa pista, decidió viajar por el mundo grabando a otros artistas callejeros con su versión del mismo tema para luego producir una sola canción que mostrara los distintos paisajes, entornos musicales y visiones melódicas de cada latitud de los cinco continentes. 

Después de siete años de haber grabado a Ridley, y más de 45 millones de vistas del video en Youtube, Playing for Change le hace honor a su lema (Connecting the world through music) y ha conectado al mundo a través de la música. Actualmente, la fundación cuenta con colaboradores en más de ochenta países y ha versionado temas de Bob Marley, John Lennon, melodías típicas del Asia y ha contado con la participación de artistas de la talla de Ziggie Marley, Bono, Manu Chao, Amaia Montero y Noel Schajris (Sin Bandera).

Lo importante de Playing For Change es que ha logrado, a partir de los fondos recopilados a través de sus dos discos, dvds, conciertos y otras iniciativas llevarle esperanza a comunidades pobres de África y Asia, al contruir escuelas de formación musical que sirvan de base para un futuro mejor de la población.

La fundación cuenta actualmente con escuelas y sitios de aprendizaje musical en Sudáfrica, Ghana, Nepal, Mali, Ruanda y otros países, algunos de ellos azotados por conflictos internos que anualmente cobran miles de víctimas.Playing for Change, en base a algo tan simple y perfecto como la música ha buscado la manera de darle una nueva visión a la gente; al unirla para hacerle frente a las diferencias y destruir barreras sociales en pro de darle poder a la gente para buscar la manera de cambiar el mundo.

09 octubre, 2012

Luna, Super Mosquito y el capitán Pulgoso (II-II)

Luna abrió los ojos y movió la cabeza, el mosquito casi cayó de la cabeza de la gatica. -Está bien, pero no te muevas tanto que me puedo caer-, le dijo mientras se acomodaba su capa roja donde tenía pintada una SM amarilla. 

El Capitán Pulgoso era su gran enémigo, con un largo aguijón, espinas y un casco negro. Super Mosquito lo había perseguido y sabía que estaba escondido entre el pelo de Luna. Al terminar de acomodar su capa, Super Mosquito saltó de la nariz de su amiga hasta sus orejas nuevamente. Un ratico después Luna escuchó una pelea. 

Unas espadas chocaban entre sí, Super Mosquito gritaba y al final dijo: -¡Ajá, ya no podrás hacer más daño!-, en ese momento Luna sintió como punticos negros empezaban a saltar de su cuerpo y salían corriendo en fila. 

Mientras tanto en su nariz el mosquito estaba parado cargando un punto negro. -Este es el jefe de las pulgas, el Capitán Pulgoso, lo he logrado derrotar y ya todos sus amigos están huyendo, no te picarán más-. 

Luna le dio un beso con su lengua y estiró su pata. -!Quédate acá, así me proteges y serás mi amigo!- le dijo la gatica. Más nunca fue picada por las pulgas y del Capitán Pulgoso más nunca se supo.

06 octubre, 2012

Luna, Super Mosquito y el capitán Pulgoso (I-II)

Todos los días en la mañana, Luna, una gatica blanca con botitas negras y manchitas en la cara; se acercaba al cuarto donde estaba su mamá. 

-¡Miau, miau!-, decía Luna mientras tocaba con sus patitas la puerta. Buscaba en sus platitos la comida, movía su lengua de arriba a abajo para tomar agua y masticaba lentamente para saborear; pescado, carne, galletitas; Luna era una gatita consentida. 

Pero un día, cuando estaba estirándose al despertar y antes de ir a tocar la puerta de su mamá, un pinchazo cerca de la nariz le sacó una lágrima. Sacó su lengua para quitarse el dolor, se pasó la patica por la cara pero igual sentía algo raro. 

Unos minutos después estaba lamiéndose en todo el cuerpo. Le picaba en la panza, las orejas, la cola, las patas; Luna solo se lamía y se rascaba; nunca había sentido nada igual. 

Su mamá al verla la cargó, la colocó en su cama y empezó a buscar entre su pelo. Le tocó la nariz, le abrió la boca, le estiró las patas y allí entre una de sus uñas, vio un puntito negro: ¡Luna tenía pulgas!. Las pulgas, esos bichos pequeños que hacen que perritos y gaticos se rasquen y se desesperen. 

Esa noche, mientras Luna trataba de dormir y olvidar las pulgas, sintió una voz en la oreja. -Luna, puedo ayudarte a quitarte la picazón-, le dijo una pequeña voz. La gatica se estiró un poco, se pasó la pata por donde estaba esa voz y abrió bien los ojos. 

Allí en su pata estaba un mosquito disfrazado de súper héroe. -Hola, soy Súper Mosquito-, le dijo el pequeño amigo mientras le saltaba a la punta de la nariz para que lo viera mejor. -Escuché que tienes un problema de pulgas, ellas son muy malas y yo siempre he estado peleando con su jefe; ¿lo conoces?-, preguntó.

28 septiembre, 2012

...Noches de la ciudad...

Hoy encontré la ciudad totalmente descuidada. Toda la gente se veía ensimismada, a mi alrededor estaban desconocidos que me generaban temor. 

El estrés corría por mis venas, las sienes me temblaban y un sudor frío recorría mi espalda. Las cornetas de los autos, el hedor de un cuerpo ajeno, el humo de los escapes, los ríos de motorizados que aparentaban trabajar para robar en el mínimo momento; todo eso me hacía odiar a la capital. 

Llegué a mi casa para tratar de descansar. Mi ropa quedó encima de la cama mientras observaba el techo, mis sentidos aún estaban alerta y no encontraba paz. El incesante sonido de las agujas de reloj, una gotera mal cerrada, todo eso me generaba más desesperación. 

Decidí irme nuevamente a la calle, me puse cómodo, tomé un cuchillo y cerré la puerta tras de mi. Al salir a la acera, la calle era diferente, más silenciosa y calmada. 

Caminé un poco y allí estaba una razón para calmarme. Ella estaba en la parada de transporte, seguramente pensando en su hogar, sus padres, sus problemas o imaginando su futuro. 

Era hermosa; ojos claros, cuello largo y refinado, caderas anchas y piernas carnosas. Su cabello lacio ondeaba con la brisa que me hizo sentir su aroma a rosas, sí; ella me daba motivos para estar más tranquilo. Mientras me acercaba, busqué la excusa perfecta para hablarle; aunque a centímetros de ella decidí cambiar de opinión. 

Esperé que volteara a verme y en cuestión de segundos le atravesé el cuello con el cuchillo, no pudo gritar y la sangre que brotaba me llenaba el rostro al mismo tiempo que la acuchillaba en el estómago. Sentí que su vida se iba entre mis manos... Finalmente me había relajado.

25 septiembre, 2012

...En la playa..


Sentados vieron las estrellas pasar 
Mientras se reflejaban en el inmenso mar 

Sus rostros se iluminaban de luna 
Las olas sus pieles bañaban 

La arena llenaba sus cuerpos 
Cuando disfrutaban ese momento 

Esa noche en la playa hicieron el amor 
Ocultos por las olas y su instinto en todo su fragor

20 septiembre, 2012

17 septiembre, 2012

...Un trío con las Cuatro Estaciones de Vivaldi...

La música clásica para ella era la mejor manera de relajarse tras una jornada de trabajo. Se sentaba desnuda junto a su cello, colocaba las Cuatro Estaciones de Vivaldi y dejaba que las notas fluyeran desde las bocinas, entraran a su cuerpo por sus oídos y volvieran a salir a través de sus dedos para llenar toda la habitación.

Cada poro de su cuerpo se estimulaba a medida que la música iba "in crescendo". Primavera con el canto de los pájaros, Verano con el llanto del pastor por la cercanía de la tormenta, el Otoño con la alegría de los labregos recogiendo la producción de la cosecha e Invierno con los sonidos del temblor del cuerpo por el frío.

Todas esas sensaciones eran para ella un cúmulo de estímulos que casi nunca compartía, en su soledad sentía cada una de las estaciones pasar por su humanidad y excitarla para luego llevarla a soñar en su cama con un amante anónimo. Sin embargo, una noche un amigo del trabajo la acompañó a su piso, tomaron vino, vieron tv y finalmente, como una táctica de cortejo comenzaron a sonar las Cuatro Estaciones. La chica le pidió unos minutos a su invitado para ir a su cuarto; allí se desnudó, colocó perfume en algunos lugares clave y fue a la sala. 

El chico quedó hipnotizado por las curvas de su anfitriona y la vio como se sentaba detrás del cello para comenzar a ejecutar las notas de Vivaldi. Se miraron fijamente y parecieron comunicarse por telepatía. Él se situó cerca de su cuello; la besó en los hombros, las orejas, las espalda y palpó su espalda, sus caderas y su cintura. 

Ella era profesional y a pesar de las caricias que recibía, la música fluía mejor a medida que las manos de su amante se desplazaban por su cuerpo. En "invierno" su piel ya temblaba de excitación. Al terminar la interpretación, se besaron y la ropa terminó de desaparecer. El cello sirvió de escondite para las cuatro manos que recorrieron los rincones más íntimos de la pareja. 

Finalmente allí mismo en el piso, al lado del instrumento musical el chico la tomó para recorrer su cuerpo. Quiso convertirse en un Vivaldi y rememorar las notas, así que con sus dedos presionó sus senos erectos, su vientre abultado e imaginó al compositor componiendo una canción. Hurgó entre su entrepierna pensando en el climax de la interpretación, sus dedos presionaron los puntos claves para crear gemidos "musicales" y con su boca besó las piernas, los pies para luego subir hasta el cuello de la chica mientras se iban haciendo uno solo.

Se unieron en una música erótica que quedó en sus momentos, como la pieza magistral de Vivaldi que los juntó de una manera artística, sensual y cargada del mejor sexo que habían experimentado al dejar abrir sus sentidos abrazando el arte clásico.

13 septiembre, 2012

...Así fue...

Esa noche habían decidido verse por última vez porque creían que aún tenían cosas de las que hablar. Ese día ella había asistido a un curso profesional y estaba agotada, así que no quería caminar y solo necesitaba estar en un lugar a solas, por eso él la pasó buscando cerca de su trabajo.

Al montarse en el carro de su acompañante, lo notó extraño y simplemente lo saludó por cortesía, se sujetó al cinturón de seguridad y observó el horizonte; si todo salía bien en unas horas esa incomoda cita terminaría y finalmente, ya no tendrían que quedar para hablar por un buen tiempo.

La música comenzó a sonar, él la usó como un catalizador para relajarse y ella para dejarse llevar por las notas musicales de esas canciones que alguna vez le dedicó. Iniciaron una parca conversación sobre sus respectivas familias, los planes a futuro, sus trabajos y esas nimiedades que dos conocidos abordan al encontrarse cara a cara. 

Ya al salir a la autopista el tráfico fluía y la velocidad del carro fue en aumento. Ella pensó que había sido buena idea abrocharse el cinturón; miró de reojo el velocímetro y le subió el volumen a la música. Él, a medida que ejercía mayor presión en el acelerador también lo hacía en su mirada a la chica.

Delineó sus curvas con sus ojos, aspiró su perfume característico para llevárselo de recuerdo y rozó lentamente el dorso de la mano de su acompañante. En ese momento su corazón palpitó mucho más rápido, la vía se tornaba divertida y decidió meterse entre los carros. 

Pasó un camión, luego se lanzó al hombrillo para adelantar a un carro que iba mucho más lento que ellos y de allí volvíó al canal rápido. La chica ya estaba preocupada, nunca le había gustado como él conducía e imaginaba que algún día se estrellarían causando un accidente fatal. 

Así fue. En uno de esos momentos en que iba por el canal rápido, él desvió la mirada para observar su boca y descuidó la vía, un bache le hizo perder el control y el carro saltó en el aire. De la radio salía una música estridente, el aire entraba por las ventanillas a gran velocidad y la chica sintió que su vida se detuvo. El automóvil giró en tirabuzón y cayó al otro lado de la vía.

El parabrisa, los vidrios y el auto eran una masa retorcida. La chica gemía por las heridas, mientras él chico salía del carro. Su exnovia pedía ayuda pero él no pensaba en eso, pensaba en que finalmente había encontrado un desenlace para su relación. Al salir sintió el olor de la gasolina y presintió lo que iba a suceder. En segundo la masa de acero retorcida estalló en llamas y, mientras las llamas se reflejaban en sus ojos, escuchó como la chica gritaba de dolor. 

Sintió el hedor a carne chamuscada, a acero bajo las llamas y así, extasiado ante el panorama de ese accidente fatal, la vio morir para darle la paz que siempre había buscado. 

11 septiembre, 2012

¡A veces!


A veces me causas impresión 
Al verme con esos ojos vivaces 
Que me tocan rincones del corazón 
Causando felicidad y emociones fugaces

A veces me haces sonreír 
Con tu manera ruidosa de hablar 
Llenándome de un deseo de vivir 
Anhelando cuando te puedo tocar 

A veces creo que te quiero 
Pero no sé si en verdad lo siento 
Será que en realidad por ti muero 
Y te miento al decir te quiero, porque en realidad 

¡Te Amo!