28 mayo, 2020

"I can't breathe": el racismo sigue asfixiando a América


Hace seis años un policía blanco mataba a un ciudadano afroamericano, Eric Garner, aplicándole una llave de estrangulamiento por el simple hecho de estar en la calle vendiendo cigarrillos de manera ilegal.

Murió por falta de oxigeno y sus gritos pidiendo ayuda: "I can´t breathe", le dieron la vuelta al mundo y causaron una revuelta social que duró semanas; la ira de la comunidad negra estalló luego que un jurado declarara inocente al funcionario de policía, David Pantaleo.

Pantaleo fue despedido de la Policía de Nueva York en 2019, lo que debió servir de ejemplo para otros policías en la misma situación, pero aparentemente, la vida no es así: en mayo de 2020 se repite un caso similar que vuelve a evidenciar el racismo que existe entre los cuerpos policiales de Estados Unidos.

George Floyd, un afroamericano de unos 40 años residente en Minneapolis, fue puesto bajo custodia por un policía blanco que decidió controlar la situación sujetándolo con su rodilla justo detrás del cuello y presionándolo contra el pavimento. Su único delito: presuntamente intentar pagar en una tienda con un billete falso de 20 dólares, no estaba armado y de acuerdo al material audiovisual, no representaba una amenaza para la policía.

Floyd exigía que lo soltaran, que no podía respirar (I can't breathe), incluso testigos que grabaron el hecho alertaron a los policías que se notaba que algo malo ocurría, pero no hubo ningún tipo de respuesta. Minutos después, Floyd fue trasladado inconsciente al hospital donde falleció.

No hay duda que Estados Unidos es la nación más poderosa del mundo. Tiene potencia militar, invade países a su antojo, controla a través de sus agencias a varios organismos del orbe, hace y deshace a medida que avanza su política tanto interna como externa. 

Son un ejemplo a seguir de constancia y eficacia, no les importa qué deben hacer para cumplir sus objetivos. De cierto modo esto es necesario para ampliar la agenda geopolítica de un Gobierno pero, ¿hace falta también aplicarlo a sus ciudadanos?

Deportistas, actores y personalidades han fustigado la actuación policial. Will Smith comentó algo muy cierto sobre el caso: el racismo no está empeorando, es que ahora se está grabando. Le Bron James, estrella de baloncesto, publicó en su Instagram una foto vistiendo una camiseta con el mensaje "I can't breathe".

¿Hay alguna diferencia entre Eric Garner y George Floyd? Ninguna. Estaban en el lugar equivocado, en el momento equivocado y se tuvieron que enfrentar con la cara más oscura del Tío Sam, esa que tratan de mantener oculta, en las sombras y archivada entre montañas de decisiones judiciales.

Hoy tenemos la ventaja de que todo se puede grabar, compartir y difundir inmediatamente por todo el mundo. Garner y Floyd quedarán como un hito negativo de todo lo que está mal en la sociedad americana.

Cuando escuchas a alguien pedir ayuda, se supone que tienes que ayudar, ¿no debería ser así?